
Días atrás escuchamos al ministro de Educación de la provincia de Santa Fe, José Goity, expresar en conferencia de prensa su preocupación por la realidad de la alfabetización inicial a nivel provincial, en términos de "catástrofe educativa" (1). En dicho contexto, el funcionario compartió los resultados de una evaluación sobre logros obtenidos en una prueba censal de fluidez lectora (en la cual se analiza precisión, rapidez y prosodia), implementada en estudiantes de segundo grado de las escuelas primarias de toda la provincia, a finales de 2024.
Los resultados que ofrecen esas pruebas realizadas exponen que 4.500 niños y niñas "no saben leer", mientras que más de 15.000 "no llegan a leer 22 palabras por minuto". Compartimos la preocupación por la alfabetización inicial de alumnos y alumnas de segundo grado, aunque la simplificación de la problemática -descripción sostenida por los resultados de una prueba de fluidez lectora- que ofrece el discurso del ministro es realmente asombrosa.
Cuando sostiene que en los últimos veinte años no hubo "evaluación de los aprendizajes" que "sean evidencia de los problemas" y tampoco hubo "aplicación de pruebas para medir aprendizajes", muestra una perspectiva específica de trabajo y de comprensión de los problemas educativos públicos. Desde otras perspectivas políticas, éticas y educativas podemos señalar que se realizaron estudios en la provincia de Santa Fe vinculados a la temática de la alfabetización inicial que se podrían retomar como insumo para el diseño de políticas educativas (2).
Uno de ellos fue el proyecto de investigación realizado entre la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y el propio ministerio entre 2014 y 2016, en el marco de una convocatoria de la citada casa de estudio, que contaba con un equipo de trabajo mixto. El proyecto, que fue una investigación diagnóstica, podríamos decir que tuvo un sentido evaluativo por la participación ministerial y el interés de fondo en la formulación de políticas. El mismo fue denominado "La enseñanza y aprendizaje de la lectura y la escritura, entre la sala de 5 años del nivel inicial y el 2° grado de la educación primaria, en escuelas públicas y privadas de la provincia de Santa Fe".
El eje de dicho proyecto estuvo puesto en la perspectiva de docentes que en ese momento estaban a cargo de salas de 5 años de nivel inicial y de primer y segundo grado de la educación primaria. Las dimensiones que se consideraron y analizaron fueron las siguientes: 1) La escuela y la sala/grado; 2) Experiencia y formación docente; 3) La alfabetización de los niños y niñas; 4) Las prácticas de enseñanza de lectura y escritura.
El estudio tuvo dos fases: la primera fue la implementación de un cuestionario a partir de una muestra representativa de docentes de toda la provincia y, la segunda implicó la realización de entrevistas con docentes seleccionados intencionalmente cuyas prácticas de alfabetización eran innovadoras. Los resultados mostraron el trabajo docente de ese momento, los materiales educativos y el uso de libros y bibliotecas, el contexto alfabetizador familiar, las dificultades que observaban en la enseñanza y aprendizaje de la oralidad, la lectura y la escritura de los niños y niñas, las oportunidades de formación docente y, la elaboración de proyectos y prácticas alfabetizadoras colaborativas.
En ese momento, fueron altos los porcentajes de respuestas que referían a prácticas de lectura de palabras simples o prácticas de escritura vinculadas a conocidas rutinas escolares (nombre propio, fechas, carteles, títulos, listas, oraciones, transcripción del pizarrón por ejemplo) y no a una enseñanza y aprendizaje enfocados en un contexto de socialización más amplio que el escolar (3).
En otro sentido, nos parece que analizar los resultados en "blanco y negro" como sostiene el ministro puede ser un modo, aunque consideramos importante matizarlos en función de lo que una prueba aporta para comprender un fenómeno educativo complejo como es la alfabetización inicial. Pensamos que sería oportuno profundizar sobre aspectos teóricos y metodológicos para promover reflexiones sobre cómo se analizaron las grabaciones orales (lectura) y de qué manera se contabilizaron las palabras en cada instancia de la prueba. Por eso, cabe la siguiente pregunta: ¿Qué relación existe entre el tipo de palabras/texto que se ofrece, la comprensión lectora, el tiempo de respuesta, la fluidez lectora y los procesos de alfabetización?
Por otra parte, cuando se trata de plantear abordajes integradores en las políticas, el propio ministro menciona a "desarrollo social" y "salud", olvidando a mí entender un ámbito sustantivo para la vida ciudadana: el de la cultura y el acceso a los bienes culturales. ¿Se podrían diseñar políticas de alfabetización, curriculares y de formación docente que articulen conceptualizaciones y acciones con el Ministerio de Cultura?
En otro orden de cosas, podemos aportar que no hay razones científicas que indiquen que el proceso metodológico de implementación de un estudio con una definición censal genere mejores resultados, que un estudio con una muestra representativa como criterio metodológico para la aplicación de un instrumento. El ministro deriva conclusiones que no tienen una relación, ni causal ni comprensiva, con la implementación de una prueba de fluidez lectora. Por ejemplo: la relación entre mejora de la fluidez lectora y continuidad de un mismo docente en el mismo grado, o mejora de la fluidez lectora en relación con la repitencia de un grado.
Asimismo, muestra disconformidad con las propuestas de unidad pedagógica entre primer y segundo grado o con la implementación del proyecto avance continuo (no repitencia). Entonces, nos preguntamos: ¿Qué relación existe entre "unidad pedagógica" o "avance continuo" con la mejora o no en los procesos de alfabetización? ¿Hasta qué punto, la evaluación y posterior conferencia de prensa tienen la intención de mostrar resultados "catastróficos" de fluidez lectora en estudiantes de segundo grado de 2024, para que luego sean comparados con otra prueba semejante que se implemente a finales de 2025 a niños y niñas que cursan segundo grado y pasaron por el "Plan de Alfabetización Raíz"? ¿Cuáles son las relaciones entre las propuestas de este plan y la fluidez lectora? ¿La fluidez lectora garantiza comprensión? ¿Qué ocurre con los procesos de escritura en los primeros años de la educación primaria?
Queremos pensar juntos y ofrecer interrogantes con respecto a repensar el diseño e implementación de políticas educativas provinciales: ¿Por qué no se analiza (o no se difunden análisis sobre) el diseño curricular de educación primaria santafesina? ¿Qué ocurre en las prácticas docentes (más allá del discurso del ministro que señala "el compromiso docente" y el "énfasis de la discusión salarial gremial")? ¿Qué análisis se realizan en relación con la formación docente y, especialmente, sobre la asignatura "Alfabetización inicial" de los profesorados de Educación Inicial y Primaria implementados desde 2009? ¿Por qué se implementan "planes remediales" y no políticas sistémicas/ holísticas para la mejora de los procesos de alfabetización inicial?
Finalmente, cabría preguntarse por la relevancia que tienen los resultados de la prueba como único insumo para la formulación de políticas públicas, sobre el porqué de las afirmaciones determinantes y relaciones causales que presenta el ministro en sus discursos y de qué manera la gestión provincial espera contar con la voluntad de docentes considerados "aplicadores" de pruebas y cuadernillos producidos y editados en otras geografías. Las políticas públicas educativas se implementan con el convencimiento de actores que participan, cuando son reconocidos intelectualmente y en sus experiencias de formación y acción, en procesos de diálogo entre los diferentes sectores del mundo educativo. O por lo menos eso sería lo esperable.
Unos intentos de aproximar el mundo de las vivencias escolares en toda su complejidad, con todas sus problemáticas, aciertos y desaciertos, acrecentando espirales de confianza. Fortaleciendo aprendizajes y ampliando horizontes de posibilidades. En el análisis, diseño e implementación de políticas nada es "borrón y cuenta nueva"... lo que generalmente ocurre es un "como sí" que no favorece a nadie y no genera innovación. Ojalá logremos aprender y enseñar al máximo, en las mejores condiciones, y que sea por el impulso de políticas públicas que propicien cambios genuinos.
Sobre la autora
Natalia Díaz es profesora y licenciada en Ciencias de la Educación de la UNER, magíster en Educación de la Universidad de San Andrés y doctora en Sentidos, Teorías y Prácticas de la Educación de la UNL. Docente e investigadora en FHUC-UNL, coordina el área de Planeamiento y Evaluación Institucional en el Rectorado de la UNL.
(1) Ver: https://bibliotecavirtual.unl.edu.ar:8443/handle/11185/853.
(2) En el marco de la Maestría en Políticas Públicas para la Educación, carrera de posgrado desarrollada por la Facultad de Humanidades y Ciencias de la UNL, en colaboración con el Ministerio de Educación de la provincia de Santa Fe, se realizaron una serie de investigaciones sobre alfabetización, trayectorias de estudiantes, educación primaria, formación docente que si bien son estudios académicos muchos de ellos estuvieron dirigidos a pensar políticas educativas públicas desde un enfoque de casos específicos dentro del territorio provincial. Ver: https://www.youtube.com/live/ J9M8rk Uiq8c?si=5jDhRtSPad9SnNPM.
(3) Ver: https://drive.google.com/file/d/1QB-jPj8HevVjOf-0lZFHIMI9ZYOUttIl/view? usp=sharing.